Exposición
Dándole forma a Europa
El camino hacia las elecciones europeas (1951-1979)
Los inicios de la democracia europea
La idea de elegir a la Eurocámara existía desde la creación de las primeras instituciones europeas. Sin embargo, esto no se materializó en las primeras décadas de las Comunidades Europeas: en lugar de votar de forma directa en la Asamblea Europea, fueron los miembros de los parlamentos nacionales los que decidieron quiénes les representarían en la Asamblea Común de la Comunidad Europea del Carbón y del Acero.
No obstante, era importante para la ciudadanía y para la incipiente Comunidad Europea que la sociedad se implicase democráticamente en las decisiones a nivel europeo. Aunque en 1960 los Estados miembros no aprobaron un proyecto de Convención para la celebración de elecciones directas (la «Convención de Dehousse»), el activismo ciudadano en favor de los comicios no cesó. Los movimientos proeuropeos hicieron campaña para convocar elecciones a escala europea, llegando algunos a simular asambleas y votaciones. En los años setenta, ciudadanos y ciudadanas enviaron peticiones al Parlamento Europeo reclamando una mayor promoción de las elecciones europeas.
En 1975, el Parlamento aprobó un informe sobre la organización de elecciones europeas por sufragio directo. El informe Patijn, que debe su nombre al eurodiputado neerlandés que lo redactó, Schelto Patijn, sirvió de base para el posterior respaldo de los Estados miembros a los comicios europeos.
En 1976, los ministros de Asuntos Exteriores de los Estados miembros firmaron el Acta Electoral Europea, por la que se acordaba celebrar elecciones directas al Parlamento Europeo. Los comicios se celebrarían a la vez en todos los países de la Comunidad Europea, aunque los Estados miembros eran libres de decidir el sistema de votación que usarían.
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El Parlamento Europeo es el lugar donde personas de toda la Unión se reúnen para debatir y decidir sobre cuestiones importantes que afectan a la vida de todos. Los ciudadanos y ciudadanas desempeñan un papel crucial en este proceso. La democracia empieza con nosotros, el pueblo.